Cuando mi sobrino me confesó que es virgen y que nunca se ha follado a ninguna chica casi se me caen las bragas al suelo. Yo pensaba que llevaba a sus amigas de calle y que todas querían tirárselo pero resultó no ser así. Al asombro de la situación se sumó la excitación que me provocaba la idea de poder ser yo quien lo desvirgara…