La frase “uno no es de piedra” no puede ser más real en mí, porque admito que soy incapaz de resistirme antes una chica guapa, y menos si es una tetona xxx como esta guarra que vais a ver, que por cierto, es mi nueva hermanastra.
Pensé que el que nos uniera algún lazo familiar, aunque fuera lejano, sí que iba a ser un motivo para que me diera un poco de reparo tener sexo con ella, pero lo confieso: soy un cerdo degenerado que no respeta nada, y cuando ella me restregó dos veces sus pechotes y me sacó la polla para comérsela, yo sólo podía pensar en dónde se la iba a meter después, y de cuántas maneras.